top of page

Guillermo Mareque

Un 17 de enero del año 1926, en la Ciudad de General Pico, Provincia de La Pampa, nació un niño al que bautizaron con los nombres de Guillermo Jesús. Jamás imagino la familia Mareque, que ese niño llegaría a ser el talentoso músico que aportaría al nacimiento del folklore regional pampeano.

Su padre trabajaba en el Correo y fue trasladado a Trenel, donde con 12 años ingresa a la Banda Municipal de esa localidad pampeana.

Tiempo más tarde su familia se traslada a Telén, donde toma contacto con guitarreros y músicos de esa localidad y pueblos vecinos.

En la década de 1940 se establece en Santa Rosa, la Capital del, en ese entonces, Territorio Nacional. Tomo clases de música con el Maestro Juan Mecca e ingresa a la Banda de policía del Territorio.

Luego toma clases de piano con Alfredo Finocchi, quien lo oriento en la ejecución del repertorio popular, introduciéndose de pleno en el ambiente de poetas y músicos de la Capital Provincial.

En 1947, se casó con Anunciata Galluccio, de cuya unión nacen dos hijos y ambos mueren, razón por la cual el poeta Edgar Morisoli, le dedico un poema titulado “El desgajado”.

En esos años formo parte de la “Delfi Jazz band”, dirigida por Delfino Nemesio.

En 1950, comienza a funcionar LRA3 Radio Nacional Santa Rosa y allí Mareque, interpretaba música con su guitarra, en ese ámbito se encuentra con Enrique Fernández Mendía (piano), Juan B. Caballero (guitarra) y Vicente Carnovale (contrabajo), conformando “Médanos y Lunas” que duro casi toda la década de 1950.

Musicalizo obras como: “Canción para la niebla puelche” (de Juan Carlos Bustriazo Ortiz), “La Chilquita” (de Julio Domínguez “El Bardino”) y “Simón Pelatay, baqueano” (de Edgar Morisoli).

 

 

 

bottom of page